viernes, 24 de junio de 2011

Indignados en el olvido

Antes de que el 15-M se instalara en Sol, ya había un centenar de personas acampadas en la Cuesta de Moyano y en Moraleja de Enmedio. En ambos casos reclaman sus viviendas 

 


El «campamento de la esperanza» que asedió parte del paseo de la Castellana durante cerca de 200 días en 2001 sentó un precedente a la hora de exigir derechos y demostrar la impotencia social ante la clase política y empresarial. En aquella ocasión, unos 1.500 trabajadores de Sistemas e Instalaciones de Telecomunicaciones (Sintel) se atrincheraron en el corazón financiero de la capital con sus lonas, sus barracones e incluso un huerto para exigir los sueldos que les debía la que fuera filial de Telefónica, y que en ese año se declaró en quiebra. Aguantaron ocho largos meses, pero consiguieron su objetivo.

Particular o colectivamente, después de este asentamiento han sido muchos los que han emulando su proceder, aunque la gran mayoría sin obtener los mismos resultados. En el recuerdo más cercano y aún presente se encuentran los «indignados» de la Puerta del Sol, que han logrado acaparar la atención de los medios.

Pero antes que ellos ya estaban viviendo y protestando en las calles de la región los «indignadísimos» cooperativistas que han invertido los ahorros de su vida en una vivienda que no llega. Por un lado, los afectados por el presunto fraude de la gestora Ofigevi y Gespozuelo, que deberían estar disfrutando de un piso en el sureste de la Comunidad desde hace cinco años. Algunos de ellos pasan las horas muertas desde el 30 de abril en la parte baja de la Cuesta de Moyano, a la espera de que la Justicia haga que les devuelvan el dinero que les han «robado».

A más de 30 kilómetros de estas víctimas se hallan otros compañeros de tragedia que acampan en las tierras sobre las que se deberían alzar sus sueños. Allí permanecen día y noche desde el 1 de octubre del pasado año. A diferencia de los del 15-M, con los que simpatizan, estos «indignados» de peso ocupan suelo legalmente. Los de Madrid lo hacen con el permiso de la Delegación del Gobierno y los de Moraleja de Enmedio con el contrato en mano de sus terrenos.

CAMPAMENTO DE LA CUESTA DE MOYANO

«Nos sentimos ignorados, entrampados y estafados»

Seis de la tarde. 30 grados a la sombra. «Los días que nos ha llovido por la noche y que no teníamos lona han sido más duros», comenta sentada en una silla de plástico María Teresa, la madre de dos de los 15.000 cooperativistas afectados por la presunta estafa de las gestoras que preside Miguel Torralbo: Ofigevi y Gespozuelo. De pie, dando la espalda al parque botánico se escucha: «Para mí, más duro que eso ha sido que me robaran el otro día el bolso con toda la documentación», añade María José, la perjudicada que más tiempo lleva pagando su casa imaginaria: 14 años que le han supuesto 30.000 euros.

«A mí me ha dolido mucho que alguna gente que ha pasado por aquí me haya recriminado que le aconsejara a mis hijos meterse en estos pisos», expresa afligida María Teresa. «¿Cómo vas a imaginar algo así?», recrimina.

Junto a ellas luchan en ese momento otros ocho damnificados. «Normalmente estamos unos 20, aunque por la noche solo dos o tres para que no quiten el campamento», señala Yolanda, quien se ha deshecho de 50.000 euros para estas viviendas. Los desarrollos fallidos de El Cañaveral, Los Ahijones, Berrocales y Los Cerros deberían estar finalizados desde hace cinco años. Los perjudicados ahora se encuentran en concurso de acreedores, sin casa y sin posibilidad, por el momento, de recuperar las cantidades aportadas por la falta de liquidez y por la respuesta negativa de la aseguradora HCC Europe que les garantizaba dichos importes por ley. «Nos sentimos entrampados, ignorados, estafados... No sabes ni qué hacer. Maldices la hora en que accedimos a ese proyecto una y otra vez», se desahoga Juani, quien como sus compañeros mantiene la esperanza de que la Justicia les devuelva lo suyo.


CAMPAMENTO DE MORALEJA DE ENMEDIO
«Estamos sin rumbo, y hemos de seguir pagando»

Daniel Plata es el primero en llegar al campamento por la tarde. Viene directamente de casa de sus padres. «No tengo dinero para meterme en nada más. Encima, estamos sin rumbo y hemos de seguir pagando», expresa mientras muestra su chocita construida a base de madera y plástico. Es en torno a las 19.00 horas cuando el asentamiento de Moraleja de Enmedio comienza a cobrar vida por no más de una veintena de personas al día. «Esto te va quemando y cada vez viene menos gente, pero aquí seguiremos unos cuantos, los más guerreros, hasta que lo consigamos y nos escuchen», expresa este joven mientras muestra el huerto que, dice, le retiene en el lugar.

Lo suyo parecía una compra segura. «La promoción se anunciaba en el periódico local, el Ayuntamiento (PP), sobre todo, y la Comunidad de Madrid avalaban el proyecto», explica Carmelo Pradas, otro de los acampados. Sin dudarlo, la cooperativa Tenería, formada por 1.200 socios, se lanzó a comprar el suelo rústico que se ubica en la carretera de Arroyomolinos del municipio, a la altura del número 3, el lugar donde se erigirían unas 10.000 viviendas —el municipio cuenta con 5.000 habitantes—. En 2001 comenzó toda la tramitación y diez años después están peor de lo que nunca imaginaron: sin viviendas y sin dinero y, en el caso de Carmelo, también sin trabajo. «Soy gruista. Me iba salvando de la crisis, pero ya me ha tocado. Vivo con mis padres y veo que con 35 años no puedo meterme en otro sitio», dice, desolado.

A diferencia de los acampados de la Cuesta de Moyano, su plan, propuesto por el Ayuntamiento, nunca ha sido aprobado por la Comunidad de Madrid, debido a que el número de viviendas era desmesurado para el censo de habitantes de la localidad. «Para colmo, el Ayuntamiento nos ha cobrado 314.000 euros, un impuesto para pormenorizar el plan y no nos ha devuelto el dinero, cuando deberían haberlo hecho en 2007», añade.

Se han manifestado, han montado el campamento, se han llegado incluso a crucificar y a enterrar en el lugar para llamar la atención de los medios y los políticos, pero nada les ha servido para que llegue una solución a corto plazo. «Parece que se han acostumbrado a vernos, y eso sí que es un problema. Estamos en una situación insostenible. Ya se han dado de baja 800 personas y no se les puede devolver el dinero. En caso de que haya que liquidar la cooperativa, habrá que subastar el terreno y perderemos un 80% de lo aportado», vaticina Carmelo. Su esperanza la depositan en la reducción del número de viviendas que ha impuesto el Gobierno regional para que el proyecto continúe adelante. De 10.000 se bajaría a unas 2.500. «Eso nos vale», reza desmoralizado Carmelo, manifestando el parecer de todos sus compañeros.









Estamos sin rumbo, y hemos de seguir pagando

Daniel Plata es el primero en llegar al campamento por la tarde. Viene directamente de casa de sus padres. «No tengo dinero para meterme en nada más. Encima, estamos sin rumbo y hemos de seguir pagando», expresa mientras muestra su chocita construida a base de madera y plástico. Es en torno a las 19.00 horas cuando el asentamiento de Moraleja de Enmedio comienza a cobrar vida por no más de una veintena de personas al día. «Esto te va quemando y cada vez viene menos gente, pero aquí seguiremos unos cuantos, los más guerreros, hasta que lo consigamos y nos escuchen», expresa este joven mientras muestra el huerto que, dice, le retiene en el lugar.

Lo suyo parecía una compra segura. «La promoción se anunciaba en el periódico local, el Ayuntamiento (PP), sobre todo, y la Comunidad de Madrid avalaban el proyecto», explica Carmelo Pradas, otro de los acampados. Sin dudarlo, la cooperativa Tenería, formada por 1.200 socios, se lanzó a comprar el suelo rústico que se ubica en la carretera de Arroyomolinos del municipio, a la altura del número 3, el lugar donde se erigirían unas 10.000 viviendas —el municipio cuenta con 5.000 habitantes—. En 2001 comenzó toda la tramitación y diez años después están peor de lo que nunca imaginaron: sin viviendas y sin dinero y, en el caso de Carmelo, también sin trabajo. «Soy gruista. Me iba salvando de la crisis, pero ya me ha tocado. Vivo con mis padres y veo que con 35 años no puedo meterme en otro sitio», dice, desolado.

A diferencia de los acampados de la Cuesta de Moyano, su plan, propuesto por el Ayuntamiento, nunca ha sido aprobado por la Comunidad de Madrid, debido a que el número de viviendas era desmesurado para el censo de habitantes de la localidad. «Para colmo, el Ayuntamiento nos ha cobrado 314.000 euros, un impuesto para pormenorizar el plan y no nos ha devuelto el dinero, cuando deberían haberlo hecho en 2007», añade.

Oídos sordos

Se han manifestado, han montado el campamento, se han llegado incluso a crucificar y a enterrar en el lugar para llamar la atención de los medios y los políticos, pero nada les ha servido para que llegue una solución a corto plazo. «Parece que se han acostumbrado a vernos, y eso sí que es un problema. Estamos en una situación insostenible. Ya se han dado de baja 800 personas y no se les puede devolver el dinero. En caso de que haya que liquidar la cooperativa, habrá que subastar el terreno y perderemos un 80% de lo aportado», vaticina Carmelo. Su esperanza la depositan en la reducción del número de viviendas que ha impuesto el Gobierno regional para que el proyecto continúe adelante. De 10.000 se bajaría a unas 2.500. «Eso nos vale», reza desmoralizado Carmelo, manifestando el parecer de todos sus compañeros.


lunes, 20 de junio de 2011

Respuesta de la Oficina del Defensor del Pueblo

Hoy he recibido una carta de la oficina del Defensor del Pueblo como continuación de la carta  Respuesta de la Oficina del Defensor del Pueblo el pasado 19/05/2011. En esta ocasión, la Oficina del Defensor del Pueblo ratifica lo que todos sabemos:

  • El 13 de diciembre de 2010 el documento del PGOU ha sido devuelto al Ayuntamiento de Moraleja con un nuevo requerido de subsanación. Advierte que una vez subsanado se presente nuevamente ante la Consejería, será de aplicación el art. 63.1 de la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid que establece los plazos de resolución. Tras las últimas modificaciones introducidas en la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Moraleja tiene la posibilidad de tramitar sobre los terrenos afectados, una Modificación Puntual, lo que conllevaría una mayor celeridad.
  • En sesión extraordinaria celebrada en Pleno municipal el día 27 de diciembre de 2010, se adoptó el acuerdo relativo al silencio administrativo positivo, en virtud del cual se entiende aprobado definitivamente el Plan General de Ordenación Urbana de Moraleja de Enmedio, una vez transcurrido con fecha 23 de octubre de 2010, el plazo establecido en el artículo 63.2 de la Ley 9/2011 de 17 de julio, sin que por parte del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid se haya adoptado y comunicado al Ayuntamiento acuerdo expreso alguno respecto al mismo.  Posteriormente en fecha 4 de enero de 2011 fue remitido dicho documento al BOCM. Así ante la no publicación en el BOCM del referido anuncio de la aprobación definitiva del documento del PGOU, se interpone por el Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio, recurso contencioso-administrativo ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo Sección 001 del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, admitrido a trámite con fecha 29 de marzo de 2011
Dado que todo parece indicar que la aprobación del PGOU de Moraleja de Enmedio es un asunto que en la actualidad está sometido a la consideración de los Tribunales de Justicia a instancia del propio Ayuntamiento, la Oficina del Defensor del Pueblo no puede continuar con la queja interpuesta ya que según la Ley Orgánica de 6 e abril de 1981, el Defensor del Pueblo no puede entrar en el examen individual de las quejas sobre las que este pendiente resolución judicial y le obliga a suspender su investigación.

De todas formas, la Oficina del Defensor del Pueblo ha recordado a la Alcaldía de Moraleja de Enmedio que se encuentra ante un problema grave que afecta a un número considerable de vecinos de la localidad que llevan 10 años esperando a que de una vez por todas se den las condiciones necesarias para poder edificar sus viviendas. Por ello, ésta Defensoría entiende, y así se lo ha comunicado a la Alcaldía, que entre tanto se dicta sentencia por los Tribunales de Justicia, el Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio en el ejercicio de sus potestades urbanísticas, debe estudiar de forma paralela otras iniciativas que permitan alcanzar una solución con el objeto de hacer efectivo a la mayor brevedad su derecho constitucional a una vivienda dignaEl propio Director General de Urbanismo y Estrategia Territorial apunta a la existencia de fórmulas menos complejas y más ágiles que la aprobación de un nuevo Plan General, como la opción de tramitar sobre los terrenos afectados una modifiación puntual del planeamiento vigente.
Lo que no puede ser es que el Ayuntamiento se inhiba en un asunto en el que estan comprometidos muchos vecinos.





miércoles, 15 de junio de 2011

Sanidad y Educación, objetivos principales de Carlos Estrada

Carlos Alberto Estrada: "La aprobación definitiva del Plan General de Urbanismo será el primer objetivo de esta legislatura. El posible cambio de consejeros de la Comunidad de Madrid puede ser un nuevo obstáculo para que el proyecto salga definitivamente adelante, pero tras las últimas conversaciones con los técnicos regionales, el alcalde cree que el documento saldrá adelante en un plazo corto"

jueves, 9 de junio de 2011

miércoles, 8 de junio de 2011

(TV) GENTE 08/06/2011

Reportaje en el programa GENTE sobre los 250 dias de acampada, el 8 de junio de 2011.

 




Los otros acampados e indignados de Madrid no se van

El movimiento del 15-M anuncia que deja la Puerta del Sol el próximo domingo, aunque hay un grupo que seguirá a título individual. En la Cuesta de Moyano y en Moraleja de Enmedio hay otros campamentos reivindicativos que van a seguir.




Los 'indignados' de Sol han anunciado que el domingo levantarán el campamento que desde el pasado 15 de mayo 'presidía' el kilómetro cero. Sin embargo, un pequeño grupo seguirá 'a título personal' allí acampado.

Pero ésta no es la única protesta de estas características que hay en nuestra región. Hay otros indignados como los que desde el 30 de abril acampan en plena Cuesta de Moyano.Son los cooperativistas del sureste de Madrid (los Berrocales, Ahijones, el Cañaveral).
Javier Plaza es uno de los acampados de la Cuesta de Moyano. Reclaman que se construyan las viviendas que llevan pagando desde hace 14 años y dicen que van a mantener su protesta y han convocado una nueva manifestación para el próximo domingo en la capital.

Otros cooperativistas, los de La Tenería en Moraleja de Enmedio, tienen el honor de ser la acampada más longeva de la Comunidad: desde el 1 de octubre del año pasado.
Carmelo Pradas, portavoz de los cooperativistas de Moraleja de Enmedio, explica que llevan 250 días acampados (son unos 40 vecinos aunque los fines de semana esa cifra sube). Reclaman el permiso para construir sus casas, tal y como prometió el alcalde. Es pesimista en cuanto a los plazos y cree que todavía queda más de un año para cumplir su objetivo.
Ni unos ni otros van a levantar el campamento y anuncian que seguirán hasta que consigan su objetivo. 




martes, 7 de junio de 2011

(TV) Madrid Directo 07/06/2011

Los cooperativistas de Moraleja de Enmedio, que quieren permiso para construir sus casas y acampados en sus terrenos desde el pasado 1 de octubre, han alcanzado los 250 días de acampada y siguen sin una solución en firme.


Fuente: Madrid Directo 07/06/2011

(RADIO) Cadena Ser Madrid Oeste 07/06/2011

Entrevista realizada a Carmelo Pradas, en la cadena Ser Madrid Oeste (102.3) el 07 de junio de 2011.


Los cooperativistas cumplen 250 días acampados a la espera de la aprobación del PGOU

Los cooperativistas de 'La Tenería', de Moraleja de Enmedio, han cumplido este martes 250 días acampados en el improvisado campamento habilitado en los terrenos que adquirieron hace años para reclamar a la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que les permita construir las 1.800 viviendas por los que ya han abonado hasta 50.000 euros.

 

Los cooperativistas han asegurado que, con este plazo, la acampada es la 'protesta colectiva más duradera' del país, y han mostrado su 'indignación ante la falta de comunicación' entre Ayuntamiento y Gobierno regional, lo que hace que 'esté aún pendiente de aprobación el PGOU del municipio que de luz verde a la construcción de nuestras viviendas'.

Un portavoz de los cooperativistas, Carmelo Pradas, ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que se sienten 'abandonados completamente'. En este punto, ha recordado que las dos Administraciones se han 'acostumbrado a que pasen los días' sin 'responder' a las reivindicaciones de los cooperativistas.

Los socios de la cooperativa, que podrían perder sus ahorros ya que la entidad 'está al borde de un concurso de acreedores', han recordado que la mayor parte de los pisos son 'protegidos' y que llevan 'desde 2001 en tramitación'.

En estos ocho meses, los acampados han llevado a cabo numerosas iniciativas para llamar la atención de las Administraciones. Así, han realizado vigilias, han promovido un 'cementerio' e incluso llegaron a crucificarse de manera simbólica.

Fuente:

 Terra Noticias 07/06/2011    -    El Buzón 07/06/2011    -    Diario QUE! 07/06/2011

  

La acampada protesta más larga de España

250 días después de que los cooperativistas de Moraleja de Enmedio comenzaran sus movilizaciones como protesta por no poder construir sus viviendas en el municipio, todavía siguen allí, convirtiendo la acampada protesta en la más duradera de España.

Hace ocho meses, alrededor de cien personas se concentraron en la localidad para exigir al Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio y a la Comunidad de Madrid que aprobaran cuanto antes el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio, con el objetivo de poder construir 1.200 viviendas en La Moralejita, aunque no esperaban que esta acción se demorara más de nueve años.

Se manifestaron en octubre, se crucificaron en noviembre, se enterraron simbólicamente en febrero y en el mes de junio todavía siguen allí. "Los políticos, tanto el Ayuntamiento como la Comunidad, se han acostumbrado a vernos aquí. Pasan los meses y hacen como si nada. No obstante, tenemos claro que no nos vamos a dar por vencidos y vamos a continuar con la protesta hasta conseguir lo que queremos", afirma Carmelo Pradas, portavoz de los acampados.


Tras esta larga espera, la única solución que les ha llegado a los manifestantes, que acampan en los terrenos donde deberían estar construidas sus viviendas, es un posible acuerdo entre las dos administraciones, "aunque todavía no hay nada firmado", comenta Pradas, quien asegura que van a seguir luchando por estos pisos "hasta el final", indignados ante la falta de comunicación de estos dos organismos.
Más tiempo del previsto
En un primer momento, no esperaban que esta protesta durara tanto tiempo. "Pensar que estaríamos un mes acampados ya nos parecía mucho", aclara Pradas, pero la lucha y el empeño por conseguir un cambio en el PGOU de Moraleja de Enmedio les llevó a construir, especialmente durante los meses de más frío, casetas de madera o de ladrillo para protegerse de las inclemencias meteorológicas. Aunque todavía hay quien sigue durmiendo en tienda de campaña. En total: 100 tiendas y 15 casetas construidas a mano.

"No es fácil continuar en la acampada", explica Pradas. "La gente se desgasta y decide abandonar, aunque después de todo este tiempo todavía somos unas 50 personas las que seguimos en los terrenos". Por las mañanas, asegura, el campamento está más solo (muchos de los manifestantes trabajan), pero por la tarde y "especialmente el fin de semana" se llena de gente que quiere y necesita que este Plan, que afecta alrededor de 1.200 familias que han invertido una media de 50.000 euros en el proyecto, se apruebe de una vez por todas. Y es que según este portavoz, "la cooperativa está al borde de un concurso de acreedores si esto no se remedia".


lunes, 6 de junio de 2011

PROTESTA CON TIENDAS DE CAMPAÑA EN MORALEJA

Cuando montaron las primeras tiendas de campaña, allá por octubre, se hicieron a la idea de que su acampada protesta podía durar como mucho un mes. Y se les antojaba largo... Han pasado más de 250 días y su poblado provisional dispone ya de cocina de gas, buzón, botiquín, huerto y hasta calles.

En la plaza de los Desamparados se reúnen cada día otros indignados, los de Moraleja de Enmedio. A diferencia de los de la acampada de Sol, la reivindicación que los ha empujado a la calle es de lo más concisa: que se apruebe el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio en cuya tramitación se han quedado atascados los proyectos de sus viviendas.

Invirtieron en ellas una media de 50.000 euros con la promesa del Ayuntamiento de que el terreno en el que iban a construirse adquiriría la categoría de urbanizable de forma «inminente». Mientras el documento del que depende el cambio trastabillea desde hace 10 años por los pasillos administrativos, el solar sigue siendo un descampado.

Ahora también allí están plantadas alrededor de un centenar de tiendas de campaña de colorines desperdigadas justo enfrente de una urbanización de chalés uniformes de ladrillo. Cuando se concienciaron de que la espera sólo era apta para pacientes, algunos se fabricaron casetas de madera en las que han llegado a colgar cortinas y a instalar hasta repisas con adornos.

«Somos la acampada protesta más larga de España», asegura Carmelo Pradas, portavoz de los indignados de Moraleja de Enmedio, no precisamente orgulloso del récord. Los trabajadores de Sintel, por citar su ejemplo más cercano, sólo tuvieron que pasar 187 días durmiendo al raso hasta lograr que se materializaran sus demandas.

A la entrada de la aldea reivindicativa a 35 kilómetros de la Puerta del Sol hay un barracón comunitario que hace las veces de comedor, cocina, sala de juntas y hasta de local de fiestas en Nochebuena y Nochevieja. Las paredes están decoradas con los múltiples artículos de prensa que se ha publicado en diferentes medios durante estos ocho meses sin que la presión mediática haya servido esta vez para desatascar el problema.
Con la ayuda de familiares y de los vecinos de este pueblo de 5.000 habitantes han amueblado la estancia (que hasta dispone de porche para las noches de verano) con equipamiento de camping y sofás desportillados. Hasta una silla de ruedas que los empleados de una residencia vecina depositaron en la basura se han incorporado a su inventario doméstico.

Los acampados de Moraleja de Enmedio no trabajan en comisiones como los de Sol, pero también se organizan para repartirse las tareas. Ponen un bote para la compra, aprovechan los fines de semana para limpiar y se turnan espontáneamente para preparar la comida.

Los del bar Jabalí, en el centro del pueblo y a cinco minutos escasos a pie de la acampada inmobiliaria, se han hinchado a darles caldos y cafés cuando el mercurio estaba por los suelos y los chicos seguían durmiendo en esas casetas maltrechas. «Están en su derecho. Han pagado por unas viviendas, pues que se las den», opina Pedro, el dueño del establecimiento, quien asegura que la mayoría de los vecinos apoya a los cooperativistas.

Sin embargo, en la madrugada pos electoral, alguien entró al campamento mientras dormían y tiró al suelo tiendas de campaña, pancartas reivindicativas e incluso las cruces de madera donde se crucificaron en noviembre sin que el PGOU resucitara a los tres días.

El retraso en la aprobación del PGOU de Moraleja de Enmedio afecta a 1.200 cooperativistas de La Tenería que corren el riesgo de perder su dinero.

El Plan comenzó a redactarse en 2002 y no fue hasta el pasado mes de diciembre cuando el Ejecutivo regional decidió no darle el visto bueno porque planteaba la construcción de 10.000 nuevas casas en un pueblo de apenas 5.000 habitantes. El Ayuntamiento (del PP) trabaja ahora en una modificación puntual del ordenamiento urbanístico vigente que puede contemplar un máximo de 3.000 inmuebles, entre ellos los 1.200 de La Tenería.


Los otros "indignados"



Fuente: El Mundo 06/06/2011

Cese del Director General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid



Fuente: B.O.C.M número 132 de 6 de junio de 2011, página 17

Los cooperativistas de Moraleja de Enmedio cumplen 250 días de acampada

Los cooperativistas de La Tenería cumplen mañana 7 de junio 250 días de acampada en Moraleja de Enmedio para exigir la aprobación del Plan General de Urbanismo (PGOU) que permita construir 1.200 viviendas, en las que otras tantas familias han invertido una media de 50.000 euros.

Según informan los cooperativistas en un comunicado, se trata de la acampada reivindicativa "más duradera de España" con la que pretenden dar a conocer su "indignación ante la falta de comunicación entre el Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio y la Comunidad de Madrid, que hace que esté aún pendiente de aprobación el PGOU del municipio".

La acampada se lleva a cabo a la entrada del municipio, en los terrenos donde deberían estar construidas las viviendas, la mayoría de las cuales serían protegidas y llevan desde 2001 en tramitación.

A lo largo de estos 8 meses largos de campamento, los manifestantes han construido casetas de madera y ladrillo para protegerse de las inclemencias meteorológicas, han simulado un cementerio, han montado un huerto, e incluso, algunos de ellos se han "crucificado" para que la opinión pública conociera su problema.

El resultado es que el recinto presenta más el aspecto de un poblado chabolista que de una acampada, según admiten en su nota los propios cooperativistas.

El objetivo que persiguen con esta actuación es dar a conocer que existe un riesgo alto de que estas 1.200 familias pierdan las viviendas en las que ya han invertido miles de euros, pues aseguran que la cooperativa "está al borde de un concurso de acreedores si esto no se remedia". EFE


Fuente: ABC 06/06/2011     -      ADN 06/06/2011

miércoles, 1 de junio de 2011

8 meses de campamento protesta y todavía sin ninguna solución

Hoy, se han cumplido 8 meses de campamento protesta en Moraleja de Enmedio, (Madrid).

Los cooperativistas de la Tenería del Municipio de Moraleja de En medio, que hartos de la falta de entendimiento entre el Ayuntamiento de la localidad y la Comunidad de Madrid decidimos acampar en los terrenos donde deberían estar construidas nuestras casas hace años para pedir a las Administraciones implicadas una solución a las 1200 familias afectadas por el despropósito del Plan General de Ordenación Urbana de Moraleja de Enmedio, cumplimos 8 meses acampados y todavía no tenemos ninguna solución.

En este último mes, el Ayuntamiento ha recibido de la Direción General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid el Plan Director de la Comunidad de Madrid, documento oficial y vinculante que marca las pautas a seguir al ayuntamiento para que dicha Modificación Puntual pueda ser aprobada de forma definitiva.

Parece que existe voluntad por parte de la Administración local en la tramitación de la Modificación Puntual de las Actuales Normas Subsidiarias de Planeamiento, según el Plan Director de la Dirección general de Urbanismo de la Comunidad de Madrid. 

Aunque a día de hoy no hay nada mas que trámites y palabras.